Industria armamentística | Diccionario Economico

Definición de Industria armamentística | Diccionario Economico

La industria armamentística es el sector de la economía encargado de la producción y comercialización de armas y equipos militares.

Por regla general, este tipo de industria desarrolla sus actividades comerciales a través de contratos con los gobiernos. Los bienes que producen son equipo militar letal, equipo de apoyo militar y consumibles tanto militares como civiles.

Aspectos clave

• Sus principales compradores son los gobiernos a través de sus respectivos ministerios de defensa. De hecho, los gobiernos no solo se convierten en clientes, sino que también actúan como reguladores y financieros.

• Producen artículos militares.

• Sus actividades comerciales están sujetas a una estricta regulación y supervisión. Operan su negocio dentro de un marco que es muy diferente al de las empresas tradicionales del mercado libre. Existen importantes barreras de entrada y salida.

• Forma parte de los sectores estratégicos de defensa y un elemento fundamental de la seguridad nacional.

• En muchos países, la industria militar puede consistir en empresas estatales.

La industria armamentista en el contexto de los negocios

Tradicionalmente, las industrias de defensa han sido parte de una industria nacional altamente segura. Sin embargo, la globalización ha ampliado sus mercados, donde han encontrado nuevas oportunidades para rentabilizar su negocio ofreciendo tecnología militar y armamento a gobiernos de diferentes países.

En términos de producción, la industria militar suele operar bajo contratos que especifican el número de unidades a producir en cada pedido. En otras palabras, esto sucede después de que se ha cerrado la venta.

De manera similar, el precio de los artículos militares no está determinado por el libre albedrío de la oferta y la demanda. Por lo tanto, el precio se determina única y exclusivamente sobre la base del costo de producción y los gastos generales de la empresa, a los que se agrega un porcentaje de utilidad.

A diferencia de otras industrias más dinámicas, las empresas de armas son menos flexibles en términos de capital y mano de obra, lo que les dificulta adaptarse a los cambios en el entorno externo.

La I+D+I es un elemento definitorio para la industria militar. Si no tienen suficiente tecnología avanzada, las empresas de armas corren el riesgo de volverse poco competitivas y no ser reclamadas. En consecuencia, la I+D es una partida importante en los presupuestos de las empresas armamentísticas.

Otro aspecto a tener en cuenta en su negocio es que los contratos que firman con las administraciones públicas son a largo plazo (10 a 15 años). Así, en caso de exclusión de la contratación pública, se hace necesario buscar alternativas de negocio.

Igual de importante es la calidad. Dada su naturaleza y la naturaleza de sus productos, la industria militar, a diferencia de la industria civil, está sujeta a controles de seguridad y calidad mucho más estrictos.

Industria militar y economía.

En cuanto a la propiedad de las empresas de armamento, normalmente en la mayoría de los países desarrollados estas empresas son privadas. Por el contrario, en los países periféricos, la industria militar está compuesta principalmente por empresas estatales.

Curiosamente, una de las características de la industria militar es que es contracíclica, es decir, sus actividades productivas se ven más afectadas por los conflictos internacionales que por las fluctuaciones de la economía.

Por otra parte, los contratos que firman los gobiernos con las empresas armamentísticas tienen un impacto importante en el empleo, no solo de forma directa sino también indirecta. Y radica en que la industria militar necesita utilizar empresas de apoyo para sus actividades productivas.

La tecnología y la industria militar están íntimamente relacionadas. La I+D+I es un factor fundamental en el sector armamentístico. Es en muchos casos que se desarrolla la llamada tecnología dual, es decir, tecnología militar, que posteriormente puede ser aplicada a fines civiles.

Del mismo modo, la industria militar puede desempeñar un papel clave en el desarrollo económico de una determinada región. Las empresas de armas estimulan la economía mediante la contratación de personal, aportando capital e infraestructura e influyendo en las políticas de desarrollo urbano. Sin embargo, no todo son beneficios, ya que las empresas de armas también crean externalidades al utilizar productos altamente contaminantes en sus procesos de fabricación.

Los detractores del papel de la industria militar en la economía argumentan que las empresas militares están desplazando la inversión en industrias civiles. En este sentido, argumentan que la industria militar no hace una contribución real a la economía real y que son las industrias civiles las que realmente crean puestos de trabajo e impulsan el desarrollo económico y social.

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